La diseñadora de interiores Laura García arrancó con “Ohana” hace 7 años atrás. Hoy recibe a sus clientes en su local que luce como una coqueta cabaña, adornada por un jardín, un espacio tan bohemio como la propia marca. Para concretar este proyecto Laura accedió a un préstamo de 251.360.000. Con este presupuesto realizó una construcción 60 metros cuadrados, que quedó terminada en 6 meses aproximadamente. La misma considera que las principales ventajas de este producto financiero fueron la rapidez del proceso y las tasas competitivas.Se trata del sueño cumplido de una emprendedora que apostó por el financiamiento “PROPYMES”.
Para ver toda la historia de Laura haga clic aquí.